lunes, 19 de diciembre de 2011

La venganza en Hamlet, Medea, Las Euménides y Sarrasine

¡Buenos días! Me alegro de inaugurar nuestro blog que trata sobre "Hamlet y la visión de la tragedia antes y después" . El tema que he elegido es el de Hamlet y la venganza, Medea, Las Euménides y Sarrasine. Mi objetivo escribiendo esta entrada es daros a conocer otra visión sobre la obra de Shakespeare y otras muchas que guardan relación con ella.

MEDEA:
Medea era la hija del rey Aestes. Jasón iba en busca del vellocino que se encontraba en ese reino. La hija del rey se enamoró nada más verlo y viendo que podía perderlo en las duras pruebas para conseguir el vellocino, le otorga una pócima que haría a Jasón invencible. Nada más conseguir el vellocino viven felices en Argos. Unos años más tarde Jasón contrae matrimonio con Creusa, la reina de Corinto. Medea finge estar arrepentida y le envía un bonito vestido a su rival, le queda como un guante pero de repente Creusa muestra una mueca de dolor, el vestido contenía veneno. Jasón llega a la casa y ve a sus hijos muertos también, Medea había matado a sus propios hijos quienes fueron víctimas de un amor frustrado.

LAS EUMÉNIDES:
Todo comienza con el asesinato de Clintemnestra , madre de las Erinias (Euménides) y de Orestes, quien la mató instigado por su hermana Electra y el Dios Apolo. Clintemnestra asesinó a su padre, el rey Agamenón, quien mató a su propia hija Ifigenia. El espíritu de Clintemnestra se le aparece a las Erinias mientras éstas estaban dormidas y les dice que persigan a Orestes por lo que hizo, se van despertando poco a poco y buscan a Orestes en Atenas. Allí él aparece abrazado a una estatua de la diosa Atenea suplicándola, ésta antes de que las Erinias maten a Orestes hace que un juzgado de doce atenienses juzgue al suplicante. Llegado el juicio, Apolo actúa como abogado de Orestes y las propias Erinias de su madre Clintemnestra. Así Atenea y Apolo convencen a las Erinias para que acepten la decisión de que en un matrimonio el hombre es más importante que la mujer. Finalizando así el juicio, las Erinias acaban llamándose Euménides ( las benévolas) por aceptar el veredicto.

SARRASINE:
En el salón parisino de los Lanty ( una familia muy misteriosa) tiene lugar una fiesta. Nadie conoce el secreto de esta familia excepto el personaje-narrador, uno de los asistentes a la fiesta y se lo cuenta a la señora Rochefi . El misterio aumenta cuando un cuadro que representa a un Adonis recostado llama la atención de la dama. El narrador sabe que se trata de un cuadro que el pintor realizó tomando como modelo una estatua de mujer y que representa a un pariente de la familia. Del cuadro trata el tema central de la obra, la trágica historia de amor vivida por el escultor Sarrasine, quien en Roma conoció a Zambinella, una cantante de ópera de la que se enamoró y cuya figura esculpió en una estatua de barro. Sarrasine se enteró de que “ella” resultó ser un cantante castrado y quiso que hiciera pagar por ello intentándola matar en vano, pues unos sicarios (envíados por el mecenas de Zambinella) le dispararon.

En la obra de Hamlet conviven los sentimientos de venganza, duda y honor. Desde el momento en que el espectro del padre se le aparece a Hamlet empieza a crecer el sentimiento venganza que luego se apacigua y se convierte en dudas, el protagonista duda de matar a su tío cuando sabe que fue él el que mató a su padre. Muchos dicen que es por la convicción cristiana de que si le mataba mientras el rey oraba, Hamlet sería enviado al “temido infierno”. El sentimiento de honor lo podemos ver en el acto en que se quiere vengar la muerte de un rey, de una persona que posee un gran poder.
Otro personaje que muestra la sed de la venganza es el propio Laertes, quien vuelve de Francia con la idea de vengar a su padre Polonio y más tarde a su hermana Ofelia, muestra más que Hamlet esa decisión de vengar a un componente de la familia pero también la irracionalidad de la que es característica la venganza.

Comparando los personajes de Medea y Hamlet, en ella el sentimiento de venganza es constante, desde que conoce el casamiento de Jasón con Creusa no cesa en su objetivo. Es directa, como Laertes, nada le impide urdir su plan de acabar con todo lo que tiene Jasón, es la decisión que le falta a Hamlet.

En la obra de Balzac, es significante el hecho de la irracionalidad, de no pensar antes de hacer alguna cosa. Sarrasine se dispone a matar a Zambinella como Laertes a Hamlet o Medea a Creusa, pero Sarrasine no tiene ningún motivo de honor ni de venganza, solo despecho por haber sido engañado como le pasó a Hamlet con la complicidad de su madre en la muerte de su padre.

Haciendo referencia a las Euménides, tanto en la obra de Shakespeare como en la de Esquilo la venganza aparece en el momento en que los espectros de Clintemnestra y del padre de Hamlet hacen su aparición. En común Hamlet y las Euménides tienen la paciencia de esperar en el caso de las Euménides a un veredicto y por otra parte en Hamlet a la ocasión perfecta para vengarse. Ambas obras coinciden en la venganza por un rey.

La obra de Shakespeare refleja perfectamente el dicho de “cada cosa a su debido tiempo” pues Hamlet no se decide a matar a Claudio, pero al final con lo que el rey le quería envenenar a él acaba siendo lo que le mató. Muestra la paciencia y la espera de la situación adecuada para efectuar dicha acción.

BIBLIOGRAFÍA:

EURÍPIDES.: Orestes-Medea-Andrómaca, Colección Austral, 1973.

ESQUILO.: Tragedias, IV Coéforos, Euménides, Consejo superior de investigaciones científicas, Madrid.

MÉNDEZ,Pedro.: Anales de filología francesa [en línea] ed. Nº13,2004-2005, Universidad de Jaén. Disponible en web: http://www.um.es/filfria/anales/n13/pedro.pdf

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